Yo robot, yo y mi ego

Yo robot, yo y mi ego

Nunca te ha pasado que ya sabes cómo va a reaccionar determinada persona cuando le digas algo? Sabes de antemano que se lo va a tomar de una determinada manera, o que lo va a ver a su forma. Puede parecer que algunas personas son como robots, están entrenadas y han aprendido a actuar, sentir, reaccionar, premiar, hablar, castigar, demostrar, pedir y todo un sinfín de actitudes que siempre llevan a cabo de la misma forma. Y siempre actuar de esa misma manera les da seguridad, les reafirman y les da la falsa seguridad de ser quienes son, están identificadas con su ego. Y en muchos casos, mas allá de darles seguridad, es una forma de defensa ante el descontrol y el miedo que supondría para ellos mismos actuar de una forma mas abierta y honesta consigo mismos.

yo

Como ya bien definió el casi por todos conocido F. Perls, en el transcurso de nuestra vida, el “yo” que todos somos, adopta una función de identificación que nos dice lo que soy, lo que yo soy. Nos identificamos con nuestro yo, con todo lo que hemos ido aprendiendo en el transcurso de nuestra vida ya sea a través de la educación, de nuestras experiencias y de nuestra vida pasada, por lo que nos han dicho que somos, o por lo que hemos ido aprendiendo de nuestros padres (ya sea por identificarnos con ellos por que los consideramos bueno o por el contrario identificarnos por rebeldía con lo contrario). Por tanto si mi yo dice que soy fuerte, yo tengo que ser fuerte, o si soy listo, tengo que ser listo, o guapo, o feo, o tonto, o lo que sea, pero tengo que serlo siempre. Y lo que implica esta identificación con lo que creo que soy, es que se deja fuera lo que no soy. De esta manera nos creemos que si somos fuertes, no somos débiles, si somos guapos no somos feos, si somos listos no somos tontos, y así podemos ir añadiendo todo con lo cual estamos identificados en nuestra función de identificación como seres, y nos vamos convirtiendo en seres parciales.

Y puede ser que para algunos, o en algunos momentos, esta identificación pueda resultarnos dolorosa, difícil de sostener y mantener en el tiempo y no entendamos qué nos está pasando, que nos sentimos mal, nos duelen nuestras relaciones, etc. Si esta identificación parcial con lo que somos no la hacemos consciente va a intentar instaurarse como una totalidad en nosotros, va a absorbernos y vamos a ir por la vida creyendo que somos de una manera que sólo es una parte sesgada de lo que en realidad somos, ya que esta identificación es solo un recorte psíquico de nuestro ser. Por el contrario asumir que a veces, según con qué, en ocasiones puedo ser tonto, o bueno, o avaro, y en otras puedo ser listo, malo o generoso, nos resultaría más fácil, y sería mas real.

El problema viene cuando esto no nos lo podemos permitir, ya que seguramente estamos más pendientes de lo que tenemos que ser que en realidad de lo que somos, de cómo tenemos que actuar que en realidad de cómo nos surge actuar según lo que sentimos en cada momento. Estar identificado es estar alienado, es estar actuando según unas normas y expectativas que nos transforman en un estereotipo, en un patrón fijo, nos encasillan en una forma de ser, de actuar, de reaccionar, nos etiquetan y nos dejan situados allí de por vida a no ser que pongamos conciencia y nos abramos a sentir y asumir que no somos solo lo que creemos que somos, que no vamos a dejar de ser nosotros por no reaccionar de la manera aprendida, la que creemos que somos.

El tengo que, no es mas que obligación. El tengo que, mas allá de las obligaciones sociales como el trabajo (y otras cosas), nos quita libertad, responsabilidad y nos anula. Nos deja en la lucha por algo que tenemos que ser, o hacer, por la falsa seguridad que nos otorga el saber que seguir siendo así va a hacer que nada cambie y nos sigan aceptando y queriendo, sigamos siendo quienes somos. Y la cosa es que somos más que eso, y que seguiremos siendo en esencia quienes somos aunque salgamos de esa lucha. Es mas responsable decir “elijo” esto, elijo en este momento ser así siendo consciente de lo que conlleva ser así o asá y sostener el miedo a la reacción del entorno.

La dificultad y la resistencia puede venir también cuando al descubrir esto en nosotros nos proponemos un cambio, nos proponemos abrirnos y mostrarnos, dar espacio a otras formas de ser que si bien han estado con nosotros siempre, nunca hemos adoptado. Y ahí es donde nos chirría, donde nos duele, donde nos asaltan lo miedos, a lo desconocido, al dolor, porque esa identificación ha sido una forma aprendida para defendernos. Defendernos ante la falta de amor, defendernos del riesgo al rechazo, al abandono, a no ser importantes, a no ser especiales, los mejores, etc. Y permitirse eso, abrirse a lo nuevo, a ser como uno es realmente, es aceptar que la relación con nuestro entorno puede cambiar, y de echo cambiará, nuestras relaciones sociales van a ser distintas. Cuando ya todos nos conocen de una determinada manera, mostrarse de otra, mas autentica, puede conectarnos con ese miedo a que no gustemos al otro de la manera que somos, a que nos rechacen, a que perdamos amistades o relaciones …

Y ése es un miedo real, y que ineludiblemente va intrínseco a la vida, la perdida. Y como toda perdida conlleva una ganancia, sea lo que sea lo que perdamos vamos a ganarnos a nosotros, con mas amor hacia uno mismo y más dispuestos hacia la vida, a la cual nos debemos disponer abiertos a recibir lo que nos trae, y a dar lo que somos, a dar fruto, a darnos a la vida con lo bueno y con lo malo de nosotros mismos y al mismo tiempo abiertos a recibir del mismo modo lo bueno y lo malo que la vida nos pueda traer. Si se produce una pérdida por ser quien somos, por mostrar un aspecto nuestro que hasta ahora ha estado escondido y al cual el entorno tiene todo el derecho a que no le guste, estoy seguro que valdrá mas la pena quererse, respetarse y ser auténtico con uno mismo que no continuar alienados de nuestra esencia con la única finalidad de que nos quieran, o que no nos dañen.

Entrevista en Radio Salt

foto entrevista miquel gabriel

Foto realizada antes de empezar la entrevista en radio salt

Recientemente he colaborado con la fundación Drissa, ayudando en la reinserción laboral de personas con discapacidad mental mediante una entrevista radiofónica. El programa (en catalán) se llama “ens patina l’embrague“, y más allá de su discapacidad, me pregunto que a quién no le patina alguna vez… Muy contento de ver cómo son capaces de organizar ellos solos una entrevista, y llevar a cabo el magazine con el máximo rigor y la mínima ayuda posible.

Encantado de compartir este momento con estas magníficas personas, y ahora, también encantado de compartirlo en mi blog, para quien quiera escucharlo.

Logo_r_dio1El siguiente reproductor emite la entrevista recortada, o puedes clicar aquí para escuchar el programa completo

Per-sona

Per-sona

A veces, tengo la extraña sensación de que estoy “peormente” mejor, sí, estoy “peormente” mejor. Es que a veces siento que estoy jodido, que no avanzo, que he embarrancado la proa y necesito encender el motor para forzar el avance. Como que el fluir, a veces, parece ir despacio para conmigo mismo, el fluir interno hacia mi descubrimiento y recursos personales, hacia mi vida, parece que se atasca. Y es que conforme uno va avanzando en su proceso y se empieza a ver el culo, cuando empiezas a ver que no todo es bonito, cuando empiezas a descubrir tu lado oscuro, es cuando estás “peormente” mejor. Es incómodo hacerse cargo, muchas veces, del pastel que uno tiene. Y más cuando creía que no tenia nada, y de repente, toma, pastel de 3 pisos. De esos gruesos y rellenos, de los que cunden, de los dejan lleno. Cuando las personas van asimilando sus cosas y dejan de echar balones fuera, cuando empiezan a responsabilizarse de sí mismas, es cuando empiezan a estar “peormente” mejor, y más durante el proceso terapéutico.

Y… Qué es una persona?

13695933457151_f

Sin entrar en muchas explicaciones y sintetizando, ya que lo mío no son las letras, persona viene de per-sonare. Para sonar más fuerte. Y es la máscara que se pone el actor, el griego, para sonar, para amplificar su voz y que todo el mundo le oiga. Progresivamente, en la comedia griega, se dejó de llamar per-sonare a la máscara y se le empezó a llamar así al papel que el actor representaba, al personaje. Más tarde, pasó a llamarse persona al ser humano, desde el punto de vista del personaje que todo ser humano es. El personaje que somos.

el-show-de-trumanOs acordáis del personaje que encarna Jim Carrey en El show de thruman, con ese interesante argumento que llama la atención, ya que parece que eso que le ocurre al protagonista sólo le ocurre al protagonista. Y yo me pregunto, ¿no seré yo Thruman? No estaré en medio de una obra de teatro? Dentro de esta obra, ¿no me ha tocado el papel de mi vida? ¿No me ha tocado un reparto de actores, mis padres, mis amigos, hermanos, etc? ¿No me han sido dadas las cosas que me toca hacer?¿No he aprendido a cómo actuar mi vida? Y quizás llevo ya en esta obra 40 años, 30, 20, 50, los que sean, y cuando salgo de este teatro y me relaciono, ya no me relaciono desde lo que soy, sino desde ése personaje que se me ha pegado y que sigo creyendo que soy, ése o ésa que hace y deshace, que representa ese papel. Ese personaje que ha aprendido a representar con éxito su propia obra de teatro.

Puedo ir de Don Quijote, o de Sancho Panza, o del que me haya gustado y haya elegido yo para mí, y al ir por la calle y encontramos, en lugar de encontrarnos desde nuestra esencia y relacionarnos desde lo que somos, nos relacionamos desde el Don Quijote, porque es imposible que yo deje de hacer de Don Quijote y tu de Sancho Panza.

Como Paco Moran en la extraña pareja, junto a Joan Pera. Tantos años haciendo la misma obra de teatro, creo que al rededor de 20, 25 años!!. o 50, en escena, actuando, representando, un montón de años en los que te reconocen por el personaje que eres. Y claro llega un momento en el que ya, evidentemente, ineludiblemente, eres ese. Y aquí es importante recordar que esto es lo que nos creemos que somos. Y que esto es plástico, esto se puede cambiar, es sólo un intermediario, es mi ego, mi persona, mi máscara, y se puede cambiar. Es el intermediario entre la esencia y el mundo, y es un intermediario que está muy arraigado. Todo lo que yo muevo dentro de mi, se amplifica y se mueve en mi personaje de una cierta manera, como si fuéramos una especie de transformer.

 

imagesEs que cuando uno va descubriendo el pastel, cuando va estando “peormente” mejor y se va dando cuenta de cosas, ha de ser capaz de mirarlo en distancia, sin opinar, sin juzgar. El proceso terapéutico es para eso, para ir ampliando la conciencia, el darse cuenta. Porque sólo siendo conscientes, sabiendo quien somos, qué hacemos, cómo actuamos, podremos elegir. Podremos cambiar. Sería una actitud como el investigador que investiga hormigas, que no opina. Sólo descubre cosas que anota en su cuaderno y constata lo que es. Cuando ve que las hormigas devoran al gusanito no empieza: vaya hijas de puta las hormigas, se comen sin piedad al gusano, y la pobre araña ahí al lado…. las hormigas … vaya hijas de puta. No hace eso no, dice: Son las 9 de la mañana, las hormigas rodean al gusano a modo de emboscada, empiezan a comer por la cabeza, lo descuartizan y se lo llevan para adentro. Observando solamente cómo se dan las cosas, sin opinar.

tumblr_llobu4Ptei1qzmcdko1_500Pero vamos, que cuando uno se coloca en investigador de su propio carácter, de su manera de ser, cuando descubre su pastelazo, generalmente dice: oooh que horror, soy una mierda. Es que siempre lo has sido!!! Cuando lo descubre debe decir oooh, de puta madre, esto es lo que me voy a currar, esto es lo que quiero transformar y lo que voy a llevar a terapia. Conforme vas poniéndote en modo investigador de ti mismo, vas viendo tu personaje, sus impulsos, los hábitos, las rutinas, el funcionamiento por defecto. En el momento que me entero, que me doy cuenta, ya dejo de ser eso, puedo salir de ahí. En cambio, si me quedo identificado no puedo operar, no puedo trabajar si sigo pegado al asunto. Y ahí es donde el barco embarranca, donde la cosa no fluye, donde repito patrones.

 

2urxnq0

 

Es una posible actitud a tener, conforme vamos viéndonos: que bien: soy un puto manipulador, soy una sufridora del copón. Cojonudo. Que bien tengo un nuevo dato. No soy yo, es eso, eso es así. Porque todos vamos a dejar al personaje cuando muramos, no hace falta detenerse a darle brillo a la moto, porque te vas a quedar sin ella. Sólo lo justo para que funcione bien y te lleve a los sitios a donde quieres ir, y en condiciones. Todo esto sirve para colocarse en un lugar de trabajo, en un lugar donde no representar ni quedarse anclado en esa persona que eres, en ese personaje para con la vida que te ha tocado y que has elegido vivir, para avanzar, para no repetir.

Gracias Ramón Ballester y tu conocimiento sobre el carácter y la personalidad.

Deixata portar

Voy a escribir esta entrada empezando por esta frase: “deixata portar”, y en ella van a ir mis emociones de este fin de semana.

Y es que he estado de boda, y me han hecho un gran regalo, esta frase: “Miquel, espero que aviat trobis a la parella de la teva vida. Jo quan vaig deixar de voler-ho controlar tot i em vaig deixar portar la meva vida va cambiar. Deixa’t portar i l’amor verdader t’apareixerà sol. Segueix els señyals“.

Y es que cuando uno ya está empezando a estar en la frontera de dar las cosas por perdidas y recibe esto, se emociona y no hay para menos. Son ya varios los años en los que he visto pasar la dichosa figurita de mesa en mesa, de novio en novio, de pareja en pareja, y siempre pasaba por delante y nunca se paraba. Y muchos los amigos que han pasado por ahí, y familiares. Muchos los que en mi vida han apostado por llegar lejos en pareja. Y la estatua nunca, yo siempre pensaba: me la van a dar, me la van a dar. Pues no. Pues toma, ahora si.

IMG_1579.JPGEsa estatuilla que durante toda mi vida he ido viendo pasar de mesa en mesa, llegó. Esta vez la rulatea se paró en mi casilla. Esta vez me tocó a mi. Y yo como siempre esperaba que pasase de largo, pero no, se plantó, y se quedó, y me la dieron a mi. Y mi sorpresa es enorme. Cuando tengo la sensación de que ya estoy en el olvido de los demás, cuando ya nadie cuenta conmigo, ahora que ya no soy molón y cuando más olvidado me tengo a mi mismo, cuando ya no soy capaz de sentir(me) lo que era, ahora que estoy aceptando lo nuevo de mi, cuando estoy empezando a aceptar que lo que era ya no es, y regreso al entorno donde durante toda mi vida yo he sido el referente para algunos de los allí presentes (mis primos mas pequeños), y cuando además asisto con el vacío personal que siento ahora, resulta que hay algun alma que me tiene en cuenta, que se acuerda de mi.

Pero es que por dios, me doy cuenta de que no paro de juzgar y juzgarme, de proyectar. Me descubrí a mi mismo ya sólo al llegar todo el discurso mental interno que se me disparaba. Cómo pretendo estar bien conmigo mismo si no paro de juzgarme. Es que me resulta muy difícil después de haber tenido una infancia, adolescencia y juventud en la que me he sentido totalmente al contrario de lo que siento ahora, siempre me he sentido importante, el centro, la persona con la que todos cuentan y quieren a su lado. El que sabe hacer eso y le sale bien. En cambio ahora no, no me siento así. Estoy en el otro extremo. Y es desde ahí desde donde ya no soy quien era, desde el juicio, desde la racionalización que me impide entrar en contacto y aceptar lo que es, lo que hay, lo que soy ahora, sin juzgar ni pretender castigar(me). Porque lo que yo era, es parte de lo que soy y es gracias a lo que era que estoy donde estoy. Y es también desde ése lugar desde el que no me dejo llevar ni fluir, desde la rigidez que produce el querer que las cosas sean como uno quiere, como antes. Y la cosa es mas sencilla, es esa cosa de observar sin juzgar, sin poner de lo propio, lo que facilita el estar con lo que hay, en el presente, en contacto, receptivo y abierto a lo interno en relación a lo externo. Es darse cuenta de lo externo y lo interno sin poner juicio entre medio.

Y vuelvo a ello. Alguien se acuerda de mí, me tiene en cuenta y ha pensado en mí para desearme algo bonito, para darme algo suyo, de su día, de su ilusión. Dios como me apreta la garganta, me quema la cara, y la nuez no para de moverse. Estoy muy emocionado. Me caen las lágrimas. Se han han acordado de mí, alguien públicamente me desea algo bueno(almenos para mi). Desea que sea el siguiente de la familia en casarse. Pero si no tengo novia!!! Me siento reconocido, enormente reconfortado y agradecido, me siento querido. Y aquí es donde me doy cuenta de nuevo la dificultad de sentir cuando no sientes, y me explico. No puedo sentirme querido por los demás cuando yo mismo no me quiero. Cuando me rechazo, me juzgo, me castigo, me aíslo, etc.

Y es que si hay algo extraño y paradójico en esta vida es esto, que no es lo que esperas, que una persona que por lo que cabría esperar(bajo mi juicio) no debiera acordarse de mí, va y me hace un regalo de semejante significación, va y me pasa el relevo. Dios!!! Que emocion. Y es que si algo tiene la vida es que no es como esperas, que mas vale fluir que controlar, que mas vale soltar que retener. Porque esperar que algo sea como te gustaría no es mas que ilusión, expectativa, esperanza … y cuando eso no se cumple, eso que esperas no llega, cataclak, piñazo, pupita, frustración, enfado, rabia, me quedo trabado, no avanzo. Y se disparan las neuras.

Pues toma controlador, ración de vida. Fuera de mi control estaba verme en una situacion similar y aquí estoy, con una estatuilla en mis manos y todo el mundo mirándome y aplaudiendo. Te lo agradezco en el alma Xavi, me has echo sentir importante para ti, y eso me emociona. Y siento un gran reconocimiento y amor hacia ti, eso y que hace muchos años que no nos vemos y que nuestra relación no ha sido unida ni mucho menos. Sólo mantengo un único recuerdo de infancia contigo, donde jugábamos en tu casa con tu hermano mayor, tu y yo de invitado.

IMG_1580.JPGTe agradezco mucho el gesto, me ha tocado, en lo más profundo, y en diversos aspectos. Y me emergen las ganas que tengo de amar y que me amen, de encontrar en la pareja desde lo profundo, en la vinculación más enraizada desde el amor al otro, el reconocimiento como ser, y la individualidad como persona que ha elegido compartirse conmigo.  Y es que entre tanto amor, que a mi deseen lo mismo en su dia, no es para menos, me veo ahi y me muero, de miedo, de compromiso, de vida, de amor y encima suena boig per tu. Y es que el control es mental, es una herramienta de la mente que aunque muchas veces es necesaria, usada en exceso nos desconecta de nuestro ser, de nuestra emoción, de nuestra necesidad genuina. Y nos frena, nos aparta, nos paraliza muchas veces para precisamente eso, no sentir, no exponerse, no asomarse al vacío, no arriesgarse a que el otro nos llegue y pueda hacernos daño. ¿Y qué es el amor sin confiar?

Pues Xavi, aquí en público te dejo mis mas sinceros deseos de prosperidad, de amor, amor del bueno, del que no posee sino el que libera, amor del que recibe y no exige, del que da y no espera, del que pide y no manipula, del que muestra y demuestra, amor de ese que te hace aprender, crecer, prosperar. Te deseo esa complicidad que se siente al mirar a ésa persona amada y saber que te ve, que le llegas y ella te llega, sin palabras, desde la conexión, la vinculación que desea lo mejor para el otro porque eso es lo mejor para ti, para vosotros. Felicidades por esta unión y prosperidad a esta nueva familia que se ha creado.

¿Qué dicen mis sueños?

¿Qué dicen mis sueños?

Los sueños, a través de su lenguaje onírico, y por muy extraño que parezca, llevan escondido un mensaje, un mensaje que muchas veces no entendemos debido quizás a lo “raro” que aparece en la historia o quizás porque muchas veces no le vemos ningún sentido a lo que en ella se representa. Pero más allá de las rarezas y los sin sentidos que podamos interpretar de nuestros propios sueños, lo cierto es que conllevan un mensaje existencial.

Quizás a alguno de vosotros os haya pasado, o quizás no, o quizás no te hayas dado cuenta, pero muchas veces en nuestra vida, estamos tan inmersos en nuestras propias vivencias del día a día que nuestra atención está más en lo que nos sucede que en lo que realmente está pasando en nuestro interior, en la dificultad interior para con nuestra propia historia vital y las dificultades que tenemos con ella. A groso modo, esto en la Gestalt es el concepto figura-fondo, el cual nos indica que a través de la atención podemos llevar contenidos del fondo a la figura o de la figura al fondo. Es decir, según donde centremos la atención, los demás contenidos pasan al fondo y viceversa. Podemos entonces decir, que la figura pasa a ser un aspecto consciente en el aquí y ahora y el resto pasa al fondo de la conciencia.

5Al observar esta imagen por ejemplo, qué ves? parece un hombre, Miguel de Cervantes. Nuestra atención se centra en esto y el resto está en el fondo. Pero no tendré que pedirte que te fijes mas, porque seguro que algo te está llamando la atención. Seguramente ya habrás visto en el centro de la imagen a Don Quijote y a Sancho Panza, con la cual cosa el rostro anterior pasará al fondo y se hará  figura la imagen de D.Quijote y Sancho Panza. Puedes apreciar algo mas? Sí el molino y el caballo sobre el que monta Don Quijote no? Y algo más? Podemos observar lo que podrían ser los rostros demoníacos o malignos y si todavía prestamos más atención, podremos ver rostros tanto en lo que pertenece al cuerpo de Cervantes como al cielo o fondo de la foto.

Podríamos decir entonces que el centrarme en un contenido (o poner mi atención a determinadas formas o aspectos) es lo que me facilita el darme cuenta o el traerlo a mi conciencia (se hace figura). Y así es como a través de la atención, en nosotros mismos, podemos ir descubriendo aspectos nuestros que permanecen en el fondo (inconsciente) y poco a poco, trabajando en nosotros mismos, ir pasándolos a nuestra conciencia. Dicen por ahí, que todo lo que se hace o dice es fruto de tu inconsciente, o sea, que todo se hace por algo, y lejos de querer corroborar lo anterior, sí que te diré que muchos aspectos nuestros nos permanecen ocultos, ocultos en el fondo y reprimidos de nuestra conciencia, lo que establece según los casos, la rigidez de cada persona, a través de las defensas generadas por los mecanismos de defensa, y propician su actuación inflexible y poca adaptación al entorno (comprensión, empatía, etc). Pero por muy rígido que uno se vuelva, lo reprimido no queda quieto, ni desaparece, y siempre ejerce una fuerza y pugna por salir, por ser liberado, y de ahí ése dicho de que todo lo que se hace es por algo.

Y digo yo, cómo puede ser que yo mismo no quiera saber mis propias cosas no? Cómo puede ser que en mi inconsciente hayan cosas importantes para mi y que no me lleguen, que estén ahí escondidas y que por más que yo quiera no salen?
Hay un límite entre lo consciente y lo no-consciente, en el cual la conciencia ordinaria parece actuar como una especie de guardia urbano que determina lo consciente, lo no consciente accesible (lo pre-consciente freudiano) y lo inconsciente, decidiendo así que es lo que puede acceder y lo que no, generando de esta manera contenidos que son reprimidos o actitudes o comportamientos distorsionados según estos accedan o no a la consciencia.

sueño de emigrarY es que lo que tiene un sueño es eso, que muestra aspectos de tu vida y de tu yo, y que como están reprimidos en el fondo de tu no consciente no puedes darte cuenta. Es como si ese policía que dirige los contenidos hacia el consciente o el inconsciente, también se durmiera y entonces es el momento en el que el inconsciente te habla, diciendo alguna cosa que es vital para ti, para la relación contigo mismo y con el entorno, y lo hace a su manera, a través del lenguaje metafórico y simbólico, y que pasa directamente a la conciencia. El mensaje del inconsciente podríamos decir que lleva intrínseco un peso emocional, un darse cuenta de algo propio que no estamos viendo o no queremos ver en nuestra vida (reprimido o distorsionado a través de los mecanismos de defensa), y de ahí que quizás muchas veces no podamos recordar nuestros sueños, porque ése mensaje (al igual que la vivencia consciente de la vida) nos resulta peligroso o amenazante, no queremos contactar con ello, y de la misma manera que conscientemente no lo vemos (lo reprimimos), el sueño no lo recordamos ya que posiblemente todavía no estemos lo suficientemente preparados para sostener su significado.

El sueño está formado por aspectos de la psique, es decir, actúa como un espejo (proyección) donde a través de los argumentos, contenidos o elementos que aparecen, nos ofrece la posibilidad de ver reflejados aspectos del soñante y nos acerca más a la verdad del paciente que la que su propio “YO” generalmente concibe.

El trabajo Gestáltico con los sueños requiere que el paciente se identifique, interprete e interaccione con los distintos elementos del sueño, con tal de poder darse cuenta de ése mensaje existencial que el sueño esconde para él.